Fernanda Gil Lozano sobre el caso en que la justicia cordobesa desestimó causa de joven porstituta abusada por cliente

Fernanda Gil Lozano sobre el caso en que la justicia cordobesa desestimó causa de joven porstituta abusada por cliente

La diputada nacional (MC) de la CC ARI, Fernanda Gil Lozano declaró ante el caso de la justicia cordobesa que dispuso que se juzgue nuevamente a un hombre acusado de cometer un abuso sexual contra una joven de 17 años, que ejercía la prostitución: “Es una muestra más del atraso cultural de la Justicia argentina, que salvo que haya un cuerpo muy lesionado o ya muerto, parecería opinar sobre la buena salud de que gozan las mujeres golpeadas. Deberían ser judicializados por mal cumplimiento de sus funciones públicas, estos actos no deberían admitirse ni repetirse Nunca Más”.

Mario Murra, el imputado, había sido absuelto, por mayoría, por la Cámara Criminal y Correccional de San Francisco –en abril de 2011- por el beneficio de la duda. En esa oportunidad, el tribunal que juzgó al imputado le otorgó mayor credibilidad a su testimonio y descartó el de la víctima, pues entendió que la joven efectivamente había acordado mantener relaciones sexuales por dinero.

Las juezas Aída Tarditti, María Esther Cafure de Battistelli y María de las Mercedes Blanc de Arabel del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba, aseveraron que “el oficio desempeñado por la víctima no importa per se un descrédito de sus dichos, ni tampoco la aceptación de la realización de actos sexuales que impliquen acciones degradantes o violentas sobre ella”.

Sobre este punto Gil Lozano agregó: “que si bien fueron tres juezas mujeres las que pudieron en Córdoba frenar el fallo de jueces de primera instancia que decidieron no castigar un acto de violencia de Género porque fue perpetrado sobre una niña en situación de prostitución, a la que decidieron no creerle, este acto no alcanza para reparar la posición de los magistrados”.

“Una vez más pensar que la prostitución es un trabajo común y corriente es el eje de la problemática, la prostitución como cualquier clase de explotación sexual viola la dignidad humana, muchas mujeres en situación de prostitución deben soportar el abuso del proxeneta, de los clientes y están expuestas al tráfico y trata de personas, entre los más graves peligros”, explicó Fernanda Gil Lozano.